El rapero Pablo Hasel va a entrar en prisión por una canción y 64 tuits que ponen a parir al rey emérito, entre otros. Buena parte de la izquierda se lleva las manos a la cabeza por semejante ataque a la libertad de expresión y salen en tromba a decirnos que debemos defender dicha libertad. Tienen razón en que es un ataque a la libertad de expresión. Pero no la tienen en cuanto que consideran que están defendiendo la libertad de expresión. ¿Contradictorio? Veamos.