Para finalizar el año, me gustaría realizar un homenaje a un héroe olvidado que sigue sufriendo por habernos regalado el ejercicio de transparencia informativa más cristalina y reveladora que hayamos podido ver jamás en la historia. Su nombre es Bradley Manning y es el soldado responsable de las famosas filtraciones de Wikileaks. The Guardian lo ha elegido como persona del año 2012.
Conocemos muy bien el nombre y la odisea de Julian Assange, otro héroe al que me he referido en otras ocasiones. Assange es un periodista que trabaja con filtraciones que le pasan sus fuentes; sin fuentes, Assange no habría podido administrar ninguna filtración. Como periodista, Julian Assange podía preveer cierta persecución y contar con cierta protección del mundo de la prensa en nombre de la libertad de información. Pero el jovencito Manning, un niñato que se mete en el ejército estadounidense y cuya conciencia se revuelve a medida que se entera de todo lo que se cuece ahí dentro, y que toma una decisión en solitario... él solo podía esperar desdén, acusaciones de traidor, y todo un sistema jurídico-militar que caería sobre él inmisericordemente.Todo un David contra un Goliat.
Bradley Manning probablemente ni haya tenido tiempo de leer todas sus filtraciones, algunas de las cuales ni alcance a comprender ni le interesen. Quizás no tenga ni siquiera un criterio político que contarle al mundo, o quizás sí. Lo importante es que tuvo una valentía que ya quisieran para sí muchos militares condecorados. Expuso su vida y su reputación en aras de los principios democráticos que sus superiores dicen y ordenan defender. Prefirió arriesgar su carrera y convertirse en un paria para sus superiores a cambio de un ejercicio de transparencia que ha marcado un antes y un después en la historia. Todo ello para beneficio del sistema democrático en general. Estaba en la boca del lobo y sacó una información que ha cambiado la historia de la diplomacia y ha hecho sonrojarse a quienes contantemente nos mienten. De esa información nos hemos beneficiado todos. Y él... todavía sigue esperando juicio, ha sufrido torturas y le espera un duro trago todavía.
Las filtraciones de Wikileaks en relación a las actuaciones de EEUU en Irak y Afganistán, así como sus presiones, injerencias y espionaje de sus embajadas, ponen de maniesto lo que todos sabemos; que el poder y la fuerza siguen estando por encima de los principios. EEUU habla de principios, pero solo actúa conforme a ellos si le conviene a sus intereses, de lo contrario los pisotea.
Hay quienes restan importancia al Cablegate argumentando que solo son cotilleos, o informes subjetivos de embajadores. Es cierto que algunos cables solo contienen valoraciones personales de nivel intermedio. Pero otras informaciones nos han mostrado como se asesinaba civiles
desarmados (periodistas incluidos) desde un helicoptero con mirilla
digital. Y con solo observar las reacciones inmediatas de EEUU a las filtraciones, y el calvario al que está siendo sometido el soldado Bradley Manning, nos debería dar una buena pista para saber que todo este escándalo ha hecho mucho daño a quienes tratan de ocultar información importante al ciudadano. De ser simples rumores, no se habrían molestado tanto.
Miles de comunicaciones internas que ponen en entredicho
las versiones que los gobiernos les dan a sus ciudadanos sobre
cuestiones sensibles para la democracia, como las torturas, los crímenes
de sus soldados, las presiones diplomáticas... En el caso español, la
obstaculización de la investigación del cámara de Telecinco José Couso, o
la complicidad de los gobiernos españoles (Zapatero y Aznar) en los
vuelos de la CIA. Pero las repercusiones fueron y son a nivel mundial. En Latinamérica han afectado a las elecciones y algunos embajadores estadounidenses han tenido que abandonar el país.
Incluso para Noam Chomsky, quien afirma que "nada de lo que Wikileaks publicó constituía realmente un secreto", la labor de servicio público que se ha ofrecido es impagable. Precisamente un colega de Chomsky, Daniel Ellsberg, se enfrentó en su momento a la misma circunstancia cuando decidió filtrar los Papeles del Pentágono que demostraban las mentiras de varios Presidentes de EEUU sobre la implicación de su país en la guerra de Vietnam. Existe un excellente documental que podéis ver y descargar sobre la historia de Daniel Ellsberg.
En este final de año, entre turrón y turrón, resulta emocionante ver cómo pervive una unión intergeneracional de heróes que se ayuda entre sí. Para mí, causas como ésta, me hacen creer en una "Navidad" llena de compromiso, coraje y bondad, al margen de cualquier credo religioso.
No os perdáis el vídeo en el que el viejo Ellsberg, pide ayuda para el joven Manning.
Estoy de acuerdo con Pepe sobre Manning y Assange. Ahora tambien sobre Snowden y Drake, el ejemplo para Snowden. Que se hace falta es acción. El 8 de septiembre de 2014 habra en "worldwide reading" sobre Snowden en lo cual podriamos acusar los gobiernos autoritarios, como EEUU y Europa, de sus crimines de guerra, de vigilancia y dominacion, y luego organizarnos para hacer sublevaciones.
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