Serie de TV "Quién es América?" (2018)

¿Es esto un montaje o es real? Esta es la primera impresión después de ver un capítulo cualquiera de la serie de TV "¿Quién es América?".  En esta gamberrada televisiva un polémico humorista británico, Sasha Baron Cohen,  famoso por sus sátiras políticas en la gran pantalla, se disfraza de personajes estrambóticos para poner en evidencia a los americanos más esperpénticos, ya sean famosos o no. 

En principio, no debería haber nada extraordinario en el planteamiento. En el pasado muchos políticos han sido víctimas de bromas telefónicas en las que se han visto comprometidos. Pero en esta ocasión, Cohen tensa la cuerda de una manera tan extrema que el televidente no puede creer que lo que está viendo sea verdad. Todo parece un montaje, un falso documental en la que ambas partes están de acuerdo. Entonces... ¿Cómo es posible que lo que vemos sea real?

Para explicarlo en términos españoles: ¿Ustedes se acuerdan de aquellas películas de Manuel Summers, "To er mundo é güeno", que a fuerza de cámaras ocultas se abusaba de la inocencia de los españoles para pegarnos unas risas? Pues esto es lo mismo, pero en EEUU, con una intención política y con muy  mala leche. Es como si el Gran Wyoming se disfrazase de facha para entrevistar a un dirigente de ultraderecha, y mediante la complicidad que se crea entre afines políticos, lograse arrancarle un exabrupto contra los inmigrantes tan brutal que a su asesor de imagen podría darle un infarto.

En realidad, si lo pensamos bien, es todavía peor: es como si lograsen convencer a Ortega Smith que enseñando el culo y gritando "soy homosexual, ríndete o te tocaré y te volverás como yo", fuese a detener a terroristas islamistas. No es una exageración, es literalmente lo que consigue Cohen en uno de sus capítulos. Su víctima, el republicano Jason Spencer, tuvo que dimitir del Congreso.

Uno tiende a pensar que "hay gente para todo" y que con un poco de suerte, un buen gancho y una víctima suficientemente ingenua, todo se puede filmar. Sí, estoy de acuerdo. Y es cierto que en algunas entrevistas al invitado se le nota que no está mordiendo el anzuelo, pero en la mayoría de los casos la reacción es muy diferente y cabe preguntarse cómo puede ser tan fácil hacer que pique tanta gente. ¿Cómo se explica que el Vice-Presidente de EEUU le firme un autógrafo en un objeto que se usa para torturar? ¿Cómo es posible que una celebrity acepte participar en una campaña para apadrinar a pobres niños soldados,... para que puedan seguir entrenándose como niños soldados? ¿Cómo puede un fabricante de barcos acceder a instalar un instrumento para electrificar el agua del mar adyacente con la intención de freír a los inmigrantes o refugiados que puede encontrarse en su camino? Los siete capítulos nos llevan a cuestionarnos quién vive en América. ¿Cómo puede haber políticos que piensen así en América? ¿Son solo una minoría o son representativos? ¿Son solo los políticos o hay muchas más gente como ellos? ¿Quién es realmente América?

La serie ¿Quién es América? es una verdadera rara avis que merece la pena inspeccionar para comprobar hasta donde se puede tensar una cuerda sin romperse. Si te gusta la TV y te interesa la política no deberías perderte esta serie.